La mezcla de sabores y texturas, -la yema semi líquida, la clara cuajada, y la textura tersa de las gambas en contraste con la suavidad de las gulas al ajillo-, hace de este vasito una combinación deliciosa.
Ingredientes Para 4 personas
- Cuatro Huevos.
- 200 g de Gulas (sucedáneo de angulas)
- 12 Gambas cocidas
- Un Diente de ajo
- Cebollino
- Aceite de oliva virgen extra
Cómo hacerlo
Cortamos unos cuadrados de film o plástico de cocina de unos diez cm de lado y los situamos sobre unas tazas, barnizando con un poquito de aceite.
Echamos un huevo en cada paquete y sazonamos ligeramente.
Cerramos los paquetes y los anudamos en la parte superior o los cerramos con un alambre de los del pan de molde.
Cocemos los huevos en agua hirviendo durante 6 minutos para que la clara cuaje y la yema se conserve en estado líquido. Abrimos los paquetes y ponemos los huevos poché en el fondo del vaso donde los vayamos a servir con ayuda de una cuchara para que no se rompan antes de tiempo.
Salteamos las gulas en una sartén con un diente de ajo laminado y cuando están, las repartimos en los cuatro vasos, procurando que queden en uno de los laterales. Por otro lado pelamos las gambas y las colocamos en el otro lado del vaso, intentando dejar hueco en el centro.
Insertamos los tenedores de madera ideales para las gulas en el vaso y rompemos la parte superior de la clara para que se pueda ver la yema en el fondo y los dejamos en el lateral del vaso para su uso por los comensales.
Decoramos con unos cebollinos, lo acompañamos con unos panes o galletas saladas y servimos inmediatamente.
Recepta i foto: Pakus (Directo al Paladar)