Precauciones al consumir el marisco en Navidad
Es sin duda el protagonista de las mesas navideñas y podemos apostar que incluso en estas fiestas, con la espada de la pandemia blandiendo la incertidumbre, el marisco será una de nuestras primeras elecciones a la hora de seleccionar la base de nuestras reducidas fiestas gastronómicas. Aunque, siempre sin excesos, aunque nos permitamos alguno.
No estará pues de más tener en cuenta algunas normas a la hora de despacharnos con el marisco.
· Sigamos conservando ese mínimo de tradición al adquirir el marisco en los establecimientos que conocemos y nos merecen confianza. Hay que tener presente que en esta época y con las circunstancias adversas que estamos padeciendo es todavía más exigente el saber la procedencia del género y el reconocimiento administrativo del expendedor. En resumen, que cumplan rigurosamente con todas las normativas de higiene y seguridad.
· Hay que comprobar el origen, la fecha de captura y la caducidad, tanto en productos frescos como congelados.
· Si el marisco que se nos ofrece es aparentemente descongelado, no hay que volver a congelarlo.
·Si decidimos comprar con antelación, ahorrando algo de precio y pensando en congelar el producto, en este caso será mejor optar mejor por productos ultra-congelados y respetar la cadena de frío.
·A la hora de proceder a descongelar el marisco, hay que hacerlo de forma segura, la víspera, en la parte menos fría de la nevera, en una fuente con rejilla para que recoja el agua y no nos afecte el frigorífico.
·El marisco crudo puede ser difícil de digerir por lo que será conveniente cocinarlo completamente ya que puede ser difícil de digerir.
·Una buena opción es elegir una selección variada de mariscos, en lugar de una más amplia cantidad de una sola especie.
